Novela realista

El desarrollo del Realismo supuso el triunfo de la novela, género que permitía retratar la realidad de forma fidedigna. Los novelistas más representativos de esta época fueron Juan Valera, Emilia Pardo Bazán, Benito Pérez Galdós y Leopoldo Alas «Clarín».

Características de la novela realista

En la novela realista todos los elementos narrativos componen un mundo verosímil. Algunas de sus características esenciales ya se han tratado anteriormente; no obstante, se debe precisar lo siguiente:

  • Los temas reproducen los conflictos de la sociedad de la época: las tensiones políticas y religiosas, la hipocresía social, las relaciones humanas, el mundo del trabajo o la importancia del dinero.
  • Los personajes ya no son héroes, sino individuos extraídos de la realidad cotidiana, que se eligen para ser observados. A medida que avanza el Realismo, los personajes ganan en profundidad y se percibe un mayor interés en el análisis y explicación de sus comportamientos. La novela realista otorga importancia a la figura femenina y a lo colectivo: el ambiente puede adquirir en ocasiones la dimensión de un personaje.
  • El narrador suele ser omnisciente y, debido a la importancia que tiene en el Realismo transmitir objetividad, cobra importancia el estilo indirecto libre y el diálogo, que permite a los personajes presentarse a sí mismos, sin intermediarios.
  • El argumento presenta, en general, sucesos que se conciben como un fragmento de una realidad más amplia. Por eso, es frecuente el comienzo in medias res (el relato se inicia cuando la historia ya ha empezado).
  • El espacio se corresponde a menudo con lugares verdaderos y concretos y el tratamiento del tiempo suele ser lineal, a semejanza del tiempo de la realidad. Sin embargo, se recurre a veces a la analepsis o retroceso para explicar el presente en el que se sitúa la novela.
  • El estilo se caracteriza por la precisión de las descripciones y la agilidad de los diálogos. El lenguaje tiende a la sencillez y, para dar verosimilitud a los personajes, se introducen a menudo regionalismos o coloquialismos.

Fuente: http://www.kalipedia.com/literatura-universal/tema/caracteristicas-novela-realista.html?x=20070418klplyllic_301.Kes&ap=0

Novela naturalista

El género épico. La novela naturalista,

La novela naturalista.
Empieza con la generación de 1860, y procede de la evolución del Realismo.
            Pretende ser un análisis científico y, por lo tanto, bien documentado de la realidad en todos sus aspectos, no sólo de la sociedad humana, sino también  de la naturaleza y del hombre como parte de esa naturaleza, la psicología, moral, etc. Los escritores naturalistas crean la novela cíclica, que abarca la historia de varias generaciones de individuos.
           Los personajes están sometidos a las leyes de la física , a la experimentación fría y al medio ambiente, y cuanto más hondo es el análisis de sus reacciones y la lógica de los hechos narrados, mas humanos serán unos y más reales otros
1)      El análisis científico aplicado a la creación novelística para llegar al conocimiento total y verídico de los hechos que se narran. El método experimental de las ciencias naturales se sigue en la concepción de la narrativa recogiendo datos, ordenándolos y analizándolos de una forma sistemática.
2)      El fatalismo La idea romántica del hado destino es sustituida por la predestinación natura, la imposición de la herencia genética, social, económica, etc., que hace que los personajes acepte su situación como algo irremediable, cayendo en el más nefasto pesimismo. Las leyes biológicas sociales son las que rigen la existencia de todo ser humano.
3)      Los ambientes sórdidos como muestra de la influencia del medio la fisiología humana. Las tabernas más cutres, los hábitat más míseros, los lugares más inhumanos.
4)      Los personajes degenerados y marginados de la sociedad pululan por las novelas naturalistas sin destino alguno y en constante lucha por sobrevivir en la más cruel miseria física, moral y económica. El “lumpen”, la delincuencia, la prostitución los drogadictos, los locos, los enfermos terminales, etc., son los protagonistas principales de las novelas naturalistas.
5)      La denuncia social como fin último de la obra literaria. El escritor debe mostrar la injusticia para concienciar al público y conseguir su rectificación.

Novela bizantina

La novela bizantina, o libros de aventuras peregrinas, es uno de los principales tipos de prosa narrativa escritos durante el siglo XII por los griegos bizantinos del Imperio Romano de Oriente. En cierta manera, se trata del género antecesor de la moderna novela de aventuras. Según la RAE, es un género novelesco, de aventuras, que se desarrolló en España principalmente en los siglos XVI y XVII, a imitación de autores helenísticos.

Características

La expresión designa un tipo de relato surgido en la literatura griega y cuya estructura y argumento responden a un esquema común: dos jóvenes amantes, que desean casarse, encuentran graves obstáculos que se lo impiden: forzada separación, viajes peligrosos, naufragios, cautiverio, etc. hasta que, finalmente, consiguen la realización de sus anhelos al encontrarse y comprobar, con satisfacción, que su amor ha permanecido fiel y se ha fortalecido en medio de tantas pruebas y contratiempos arriesgados.

Se trata, pues, de un género de estirpe clásica. Los valores descubiertos en cuanto a la técnica narrativa: verosimilitud de la acción y descripción de espacios, verdad psicológica de los personajes, ingenio de la composición, comienzo in medias res (como en la poesía heroica), etc. y, sobre todo, en el contenido: visión moralizadora de la vida, exaltación del amor casto y de los afectos puros promotores de felicidad, castigo del amor ilícito, abundancia de máximas y sentencias, etc., convierten a estas obras en el modelo ideal de lectura humanista frente a la invasión de la literatura caballeresca.

Orígenes

Los orígenes de la novela bizantina se remontan a la Grecia helenística de principios del siglo III d. C., en que el escritor griego Heliodoro de Émesa compuso la obra clásica del género, las Etiópicas o Teágenes y Cariclea. Este y otros autores de su tiempo como Aquiles Tacio y su Leucipa y Clitofonte fueron traducidos en Europa durante el Renacimientoy sirvieron de modelo para que se recrease el género en los siglos XVI y XVII, en que este género, a causa de su origen griego, fue considerado una especie de épica en prosa por los preceptistas.

Obras representativas

El primer español en crear una novela bizantina fue Alonso Núñez de Reinoso con su Historia de los amores de Clareo y Florisea, y los trabajos de la sin ventura Isea (1552), bastante influida por la novela de Aquiles Tacio, que pretende imitar.

Siguió luego la Selva de aventuras, de Jerónimo de Contreras (1565) y El peregrino en su patria (1604), de Lope de Vega, que se singulariza por nacionalizar el género haciendo que casi todos los viajes y aventuras transcurran dentro de la misma España e incluir poemas y autos sacramentales.

También Miguel de Cervantes sintió el encanto del género y lo cultivó en dos de sus Novelas ejemplaresLa española inglesa y El amante liberal, e incluso la última novela que llegó a componer, Los trabajos de Persiles y Sigismunda (1617), pertenece a este género.

La anónima Los amantes peregrinos Angelia y Lucenrique, compuesta entre 1623 y 1625; Historia de Hipólito y Aminta (1627), que llegó a alcanzar cuatro ediciones, de Francisco de Quintana, Historia de las fortunas de Semprilis y Genorodano (1629), de Juan Enríquez de Zúñiga, Eustorgio y Clorilene, historia moscóvica (1629), de Enrique Suárez de Mendoza y Figueroa, marcan la madurez del género.

Después, la novela bizantina adquirió una gran carga alegórica y moral que impulsó su crisis como género narrativo. Esta etapa la testimonian obras como el León prodigioso(1634) y Entendimiento y verdad (1673) de Cosme Gómez Tejada de los Reyes, y El Criticón (1651, 1653 y 1657) de Baltasar Gracián.

Fuente: http://es.wikipedia.org/wiki/Novela_bizantina

Novela picaresca

Novela picaresca es un género literario en prosa, muy característico de la literatura española, si bien trascendió a la europea en general. Surgió en los años de transición entre el Renacimiento y el Barroco, durante el llamado Siglo de Oro de las letras españolas.

La novela picaresca nació como parodia de las narraciones idealizadoras del Renacimiento, las epopeyas, los libros de caballerías, la novela sentimental o la novela pastoril. El fuerte contraste con la realidad social generó como respuesta irónica las llamadas «antinovelas», de carácter antiheróico, protagonizadas por anticaballeros que amaban a damas, mostrando lo sórdido de la realidad social: los hidalgo empobrecidos, los miserables desheredados y los conversos marginados frente a caballeros y burgueses enriquecidos que vivían en otra realidad observada por encima de sus cuellos engolados. Por otra parte, y según Herrero García: Un producto pseudoascético, hijo de las circunstancias peculiares del espíritu español, que hace de las confesiones autobiográficas de pecadores escarmentados un instrumento de corrección.

En España el género extraía la sustancia moral, social y religiosa del contraste cotidiano entre dos estamentos, el de los nobles y el de los siervos. Durante el siglo XVII comienza a vulgarizarse y degradarse la hidalguía y personajes como don Quijote o el hidalgo pobre que se hace servir por el Lazarillo de Tormes son ilustraciones de este fenómeno en la literatura española, encontrando también su correlato reflejado por el género teatral del entremés. El humilde guitón, bigardo o pícaro de cocina como tal es un anticaballero errante en una «epopeya del hambre» a través de un mundo miserable, donde sólo se sobrevive gracias a la estafa y el engaño y donde toda expectativa de ascenso social es una ilusión; los vagabundeos de un Pablos o de un Guzmán constituyen el contrapunto irónico a los de los valientes caballeros. El Lazarillo de Tormes (1554) es el comienzo de una crítica de los valores dominantes de la honra y de la hipocresía que hallará su culminación y configuración canónica con la Primera parte de Guzmán de Alfarache (1599), de Mateo Alemán.

Las características de este género son las siguientes:

  • El protagonista es un pícaro, de muy bajo rango social o estamento y descendiente de padres sin honor o abiertamente marginados o delincuentes. Perfilándose como un antihéroe, resulta un contrapunto al ideal caballeresco. Su aspiración es mejorar su condición social, pero para ello recurre a su astucia y a procedimientos ilegítimos como el engaño y la estafa. Vive al margen de los códigos dehonra propios de las clases altas de la sociedad de su época y su libertad es su gran bien, pero también posee una frecuente mala conciencia que, por ejemplo en Guzmán de Alfarache, se extiende a lo largo de páginas y más páginas de consideraciones éticas, morales y religiosas.
  • Estructura de falsa autobiografía. La novela de humor está narrada en primera persona como si el protagonista, un pecador arrepentido y antihéroe, fuera el autor y narrara sus propias aventuras con la intención de moralizar, empezando por su genealogía, antagónica a lo que se supone es la estirpe de un caballero. El pícaro aparece en la novela desde una doble perspectiva: como autor y como actor. Como autor se sitúa en un tiempo presente que mira hacia su pasado y narra una acción cuyo desenlace conoce de antemano.
  • Determinismo: aunque el pícaro intenta mejorar de condición social, fracasa siempre y siempre será un pícaro. Por eso la estructura de la novela picaresca es siempre abierta. Las aventuras que se narran podrían continuarse indefinidamente, porque no hay evolución posible que cambie la historia.
  • Ideología moralizante y pesimista. Cada novela picaresca está narrada desde una perspectiva final de desengaño; vendría a ser un gran «ejemplo» de conducta aberrante que, sistemáticamente, resulta castigada. La picaresca está muy influida por la retórica sacra de la época, basada en muchos casos, en la predicación de «ejemplos», en los que se narra la conducta descarriada de un individuo que, finalmente, es castigado o se arrepiente.
  • Intención satírica y estructura itinerante. La sociedad es criticada en todas sus capas, a través de las cuales deambula el protagonista en una estructura itinerante en la que se pone al servicio cada vez de un elemento representativo de cada una. De ese modo el pícaro asiste como espectador privilegiado a la hipocresía que representa cada uno de sus poderosos dueños, a los que critica desde su condición de desheredado porque no dan ejemplo de lo que deben ser.
  • Realismo, incluso naturalismo al describir algunos de los aspectos más desagradables de la realidad, que nunca se presentará como idealizada sino como burla o desengaño.

Fuente: http://es.wikipedia.org/wiki/Novela_picaresca

Novela Social

CARACTERÍSTICAS
Corrientes literarias que influyen el ella:
• Neorealismo italiano
• Novela americana de la generación perdida
Se consolida la renovación de la novela.
Grupo generacional comprometido.
Se interesan por los problemas humanos y sociales del momento y quieren contribuir a la transformación de la realidad española, de ahí que la reivindicación social es el denominador común entre todos ellos.
Existen dos tendencias:
• Objetivismo: el escritor, simple espectador, se limita a presentar la realidad sin emitir juicios. Con una mirada cinematográfica describe la realidad para que aparezca ante el lector tal cual es. Influida por el behaviorismo (conductismo).
El Jarama, Rafael Sánchez   Ferlosio.
Realismo social: el escritor no sólo presenta la realidad sino que la explica y denuncia las injusticias que marginan a determinados grupos sociales.
Las ratas, Miguel Delibes
Tema: la sociedad española caracterizada por la soledad individual y colectiva.

La colmena de Camilo José Cela abre este período.

Novela psicológica

La novela psicológica o novela de análisis psicológico, también conocida como realismo psicológico, es una obra de ficción en prosa que enfatiza la caracterización interior de sus personajes, sus motivos, circunstancias y acción interna que nace y se desarrolla a partir de la acción externa. La novela psicológica «pospone la narración a la descripción de los estados de ánimo, pasiones y conflictos psicológicos»1 de los personajes.

Técnicas

La novela psicológica no relata simplemente lo que ocurre, sino que explica el por qué y la finalidad de esta acción. En esta clase de literatura, el personaje y su caracterización son más importantes de lo normal, y profundizan más en la mente del personaje que las novelas de otro tipo. La novela psicológica puede llamarse la novela del «hombre interior».

En muchos casos, se usan las técnicas del flujo de conciencia o monólogo interior, para ilustrar mejor el trabajo interno de la mente humana. También pueden incluirse flashbacks. Otro recurso utilizado para indagar en el interior del personaje es a través de textos directamente emanados del personaje, como diarios íntimos o cartas.


Pamela o la virtud recompensada(1740), de Samuel Richardson, puede considerarse un precedente de la novela psicológica realista.

Ejemplos

La Novela de Genji, escrito en el Japón del siglo XI es considerada la primera novela psicológica.

En la literatura occidental, los orígenes de la novela psicológica pueden remontarse en La Fiammetta (1344) de Giovanni Boccaccio, esto es, antes de que se acuñara el término psicología. Otro ejemplo es Don Quijote de la Mancha de Miguel de Cervantes.

El primer auge de la novela psicológica como un género novelístico se establece con la novela sentimental de la que Pamela o la virtud recompensada de Samuel Richardson es un primer ejemplo. Su fuerza descansa precisamente en el conocimiento del corazón humano, delineando el sentimiento, sus cambios; el motivo dominante de la obra es ese análisis minucioso de los sentimientos de su protagonista, captando claramente las emociones.

La princesa de Clèves (siglo XVII), de Madame de La Fayette es considerada una primera precursora de la novela psicológica. Posteriormente, la novela psicológica por excelencia en francés es Rojo y negro de Stendhal.

Grandes novelas psicológicas son las de Dostoievski. En su obra más conocida, Crimen y castigo, la novela psicológica alcanza su perfección más absoluta, debatiendo al individuo entre la aceptación de un tormento o la justificación de su acto.

En España se cultivó esta corriente dentro del realismo decimonónico, por autores como Benito Pérez GaldósEmilia Pardo Bazán yArmando Palacio Valdés

La novela pastoril

La novela pastoril es un subgénero narrativo épico que se configuró históricamente en el Renacimiento a partir de la aparición de la Arcadia del italiano Jacopo Sannazaro.

Origen y evolución de género

Existía ya una amplia tradición anterior que viene de la literatura pastoril, centrada en torno al subgénero lírico de la égloga o poema; la mayoría de las veces consistía en un diálogo en que diversos pastores idealizados se cuentan sus amores, afortunados o no. La égloga o idilio pastoril nació con el poeta griego Teócrito, quien fue seguido en este género por el también griego Mosco y el poeta romano Virgilio, quien innovó al hacer de sus pastores trasunto de personajes reales de su entorno: Mecenas, el emperador Augustoetc. Posteriormente, en la Edad Media, Giovanni Boccaccio compuso algunas prosas narrativas de tema pastoril y eglógico, como el Ninfale d’Ameto y el Ninfale Fiesolano. Pero será Jacopo Sannazaro quien, en su Arcadia (1504, traducida al castellano en 1549), configure definitivamente el género como un argumento narrativo entreverado de composiciones o canciones en verso de tema amoroso entonadas por los pastores.

La novela pastoril refleja la visión idealista y poco realista del Renacimiento, su espíritu estilizado y su platonismo. La temática es siempre amorosa y ofrece una visión estática de la naturaleza. La narración es morosa y lenta y la acción, que es sin embargo embrollada, se desenvuelve con premiosidad ya que lo que importa fundamentalmente es el análisis de los sentimientos y pasiones de los personajes y la descripción del paisaje natural. Por otra parte, son frecuentes las interrupciones con digresiones de todo género o incluso con otras historias ajenas a la acción principal, aparte de los constantes versos intercalados.

Ya hay elementos típicos del género bucólico en las églogas de Garcilaso de la Vega, que había asistido a la Academia Pontaniana de Nápoles y conocía por ello muy bien la obra de su miembro Actius Sincerus, (Jacopo Sannazaro). Así se muestra en los diálogos de Salicio y Nemoroso. También hay elementos pastoriles en los capítulos finales del Amadís de Grecia (1530) de Feliciano de Silva, donde se relata cómo el príncipe Florisel de Niquea se hizo pastor y adoptó el nombre de Laterel Silvestre por amor de la pastora Silvia. Pero el género pasó a España ya configurado de la mano de los siete libros de la italianizante Diana (1559) del portugués que escribía en castellano Jorge de Montemayor. La obra alcanzó un enorme éxito y se tradujo y fue imitada en toda Europa (por ejemplo, la Astrea de Honoré d’Urfé en Francia y, también en este mismo país, pero ya en el siglo XVIII, laEstela de Jean Pierre Claris de Florián, etc.). El género se nacionalizó después con la Diana de Alonso Pérez y la Diana enamorada (1564) de Gaspar Gil Polo, que son continuaciones de la obra de Montemayor, la segunda de ellas ambientada en el paisaje valenciano. En la obra de Gil Polo, además, se ensaya la introducción de nuevos metros. 

El género tuvo gran cantidad de seguidores. Destacan especialmente Los diez libros de Fortuna de Amor de Antonio de Lofraso (1573), El pastor de Fílida (1582) de Luis Gálvez de Montalvo, La Galatea (1585) de Miguel de Cervantes, Desengaño de celos (1586) de Bartolomé López de Enciso, Ninfas y pastores de Henares (1587) de Bernardo González de Bobadilla, El Pastor de Iberia de Bernardo de la Vega (1591), La Arcadia (1598) de Félix Lope de Vega, La constante Amarilis (1607) de Cristóbal Suárez de Figueroa y el Siglo de Oro en las selvas de Erifile (1608) de Bernardo de Balbuena, que supone un retorno a la tradición italianizante del género en castellano. Hubo incluso versiones «a lo divino», comoLos pastores de Belén, 1612, de Lope de Vega. 

Fuente: http://es.wikipedia.org/wiki/Novela_pastoril

La novela costumbrista

La novela costumbrista tuvo numerosos cultores. En parte, la novela costumbrista debe considerarse como la hermana mayor del cuadro de costumbres, que tanta difusión alcanza en la época. Aunque en realidad lo que hacía por lo común la novela costumbrista era disponer como fondo una sucesión de escenas populares, de acentuado color local, a las cuales estaba íntimamente ligada la trama de la obra.

A su vez, conviene declarar que ciertos contactos entre la novela social y la novela costumbrista se rompen al considerar que la segunda acentúa en particular lo local, lo pintoresco que trata de justificarse precisamente por eso, en su carácter propio, distintivo, fuera de alegatos o choques de capas sociales.

La novela costumbrista tuvo especial resonancia en algunos países. Así, en México o en Colombia, donde el costumbrismo se inserta también en el campo de otras novelas, no específicamente costumbristas. Por ejemplo, es notorio el peso que elementos de esta naturaleza tienen en una novela sentimental como María(novela), de Jorge Isaacs. Es evidente que el costumbrismo no se superpone aquí al eje fundamental de relato, pero es indudable también que—aún sin fusionarse—lo sentimos (y evocamos) como un elemento imprescindible del relato: fondo vivo y –¿y por qué no?– tema secundario que sirve a menudo de necesaria, aquíetadora alternancia a la historia sentimental. También, punto de referencia, ámbito de hombre y circunstancia en que la novela nace.

 

En general, el costumbrismo suele hallarse como ingrediente en gran parte de las novelas hispanoamericanas de todo tipo, de la misma manera que suele hallarse el paisaje americano. Así como a veces recurrían a épocas y tierras lejanas, en ansías de evasión, otras veces gustaban de lo cercano y cotidiano, que—entonces, sobre todo—despuntaba primicias inéditas. Era esta también una manera de ganar lectores y aún de dar «sello» americano a las novelas. Por una parte, realidad conocida (para el lector de estas tierras), y, por otra, diferenciación frente a obras más famosas que venían del otro lado del Atlántico.

Naturalmente, resultaba común que la obra costumbrista americana, en su afán de reflejar de la manera más fiel posible una realidad, abundara en localismos. De ahí también las notas y explicaciones en textos que aspiran a ganar lectores lejanos.

Fuente: http://es.wikipedia.org/wiki/Costumbrismo_literario

Novela caballeresca

Las novelas de caballerías tuvieron su auge en España durante el siglo XVI.

En las novelas caballerescas sobreviven los temas y actitudes de la Edad Media: la defensa del honor, la idealización de la mujer, el ejercicio individual de la justicia. El héroe caballeresco es un paladín (caballero que luchaba en la guerra y sobresalía por sus hazañas; persona que defiende frente a otros una idea, una actitud,) que sale en busca de aventuras, y dispuesto a sostener con las armas, y contra cualquier tipo de enemigos, los principios por los que lucha. El ámbito en el que se mueve el caballero es fantástico; sus hazañas so extraordinarias, sobrenaturales: vence a gigantes y a seres monstruosos; castillos, ínsulas, encantamientos, y hechos sobrehumanos aparecen constantemente en el mundo novelesco de los caballeros andantes; su vida es una cadena interminable de hazañas.

La novela más famosa de este género y con la que se cierra dicho género es Don Quijote. Criticado en su época por ridiculizar las novelas de caballerías, hoy en día es uno de los libros más leídos de la historia.

A continuación, una pequeña lista de las novelas más famosas en su época:

  • El libro del caballero Zifar
  • Tirant lo Blanch, de Joan Martorell. (Valencia 1490, en valenciano; Valladolid 1511, traducción al castellano)
  • Amadís de Gaula, de Garci Rodríguez de Montalvo. (Zaragoza, 1508)
  • Las Sergas de Esplandián, de Garci Rodríguez de Montalvo. (Sevilla, 1510)
  • Florisando, Príncipe de Cantaria (Salamanca, 1510)
  • Lisuarte de Grecia, de Feliciano de Silva (Sevilla, 1514)
  • Palmerín de Olivia (1511)
  • El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha (1605 y 1615), de Miguel Cervantes.

Novela romántica

La novela romántica  se atiene a una serie de normas. Entre ellas se encuentra que normalmente la trama trata una relación sentimental y el amor que se presenta es el amor romántico. Este rasgo ha sufrido variaciones con el tiempo.

En la actualidad la Asociación de Escritoras de Novelas Románticas de Estados Unidos considera que las novelas románticas no son aquellas que hablan exclusivamente de amor romántico heterosexual, sino que también pueden tatar del amor romántico homosexual.

A medida que se va desarrollando la trama a lo largo de la novela es posible que aparezcan otro tipo de subtramas que no necesariamente tienen que por qué ser de temática amorosa. Lo que siempre debe suceder es que la trama principalobligatoriamente sea de tema amoroso.

Las novelas románticas siempre acaban teniendo final feliz. El lector, después de haber terminado la novela romántica, se queda con la sensación de que los dos amantes que han protagonizado la trama seguirán juntos por el resto de su vida.

El sustrato de todas las novelas románticas es la justicia emocional innata. Esto en las tramas de las novelas románticas se resuelve mostrando una imagen maniquea de la realidad.

En las novelas románticas la gente buena acaba siendo recompensada y la mala castigada. Los amantes en la novela romántica arriesgan lo que sea necesario para luchar por su amor.

 

Fuente: http://es.wikipedia.org/wiki/Novela